*** (Pío IX, adhiriéndose a los decretos de los Soberanos Pontífices Clemente VIII, Benedicto XIV, Pío VII y León XII, concedió a los que rezaren esta oración indulgencia plenaria, a condición de que lo hagan devotamente delante de un crucifijo, en cualquier forma que sea, verdaderamente arrepentidos, previa Confesión y Comunión, y orando por algún espacio de tiempo según la mente de Su Santidad (31 de junio de 1858).
“¿Qué es el fanatismo? El fanatismo consiste en poner arriba de todo los valores religiosos –lo cuál está bien- y después suprimir o despreciar todos los otros valores, lo cuál está mal. Los valores religiosos son ciertamente los más altos de todos, son la cúspide; la cúspide tiene que estar sustentada por la falda. Si Ud. se sube a la cúspide y después retira la falda, se cae Ud. y la cúspide; y ésta deja de ser cúspide. El fanático es muy religioso o cree serlo; pero da en despreciar todo el resto, la ciencia, el arte, la nobleza e incluso las virtudes naturales, el talento, el genio, el espíritu de empresa. Su religión se desboca, como si dijéramos. Hay religiosos que son buenos religiosos (o lo creen) y desprecian a medio mundo; desprecian, por ejemplo, a las otras Órdenes religiosas o a los casados, desprecian el Matrimonio. Son fanáticos.”
Padre Leonardo Castellani
“El fanatismo es la incapacidad de concebir seriamente la alternativa de una proposición. No tiene nada que ver con la creencia en la proposición misma. Un hombre puede estar suficientemente seguro de algo cómo para dejarse quemar por ello, o para dar guerra a todo el mundo, y sin embargo no estar ni un milímetro más cerca de ser fanático. Es fanático solamente cuando no puede comprender que su dogma es un dogma, aunque sea verdad. No es fanatismo –por ejemplo- tratar al Corán como sobrenatural. Pero es fanatismo tratar al Corán como natural, como evidente para cualquiera y común a todos”.
“La verdadera liberalidad, en resumen, consiste en ser capaz de imaginarse al enemigo. El hombre libre no es aquél que piensa que todas las opiniones son igualmente verdaderas o falsas: eso no es libertad, sino debilidad mental. El hombre libre es aquél que ve los errores con la misma claridad con que ve la verdad”.
“El fanatismo es la incapacidad de una mente para imaginarse otra mente. El fanático está entre los más pobres de los hijos de los hombres. Tiene un solo universo. Todos, por cierto, deben ver un cosmos como el verdadero; pero él no puede ver ningún otro cosmos, ni siquiera como una hipótesis”.
G. K. Chesterton
Tomado de: CASTELLANI, Leonardo: Domingueras Prédicas, Tomo I, Sermón para el Domingo I de Pasión.
Un fiscal federal pidió a la Justicia que declare en un pronunciamento la existencia de esosviajesasesinos en los que se arrojaban a prisioneros a las aguas, en el Proceso.
El fiscal federalFederico Delgadotiene “probado” que desde la base aérea de Palomar partían“vuelos de la muerte”desde los cuales se arrojaban prisioneros a las aguas durante la última dictadura militar y le pidió al juez Daniel Rafecasque así lo declare en un pronunciamiento judicial.
Mediante un dictamen de más de cuarenta carillas, que incluye anexos con datos, listados y hasta una maqueta, Delgado sostuvo que en el predio comprendido entre las calles Benjamín Matienzo, Capitán Rosales, Derqui José Rodó, el arroyo Morón y las vías del ferrocarril San Martín, operaba“el grupo de tareas denominado ‘G 100’ que materializaba la represión ilegal”.
Tras analizar el resultado de una paciente investigación de más de un año y medio, el fiscal solicitó “formalmente” al juez Rafecas que“declare judicialmente probado la existencia de los denominados ‘vuelos de la muerte’ en la Primera Brigada Aérea de Palomar y que disponga las diligencias que considere necesarias para someter esta investigación parcial y sus conclusiones al escrutinio de la sociedad civil”.
Delgado sostuvo que en esa base aérea“los ciudadanos de 18 años eran convocados al servicio militar obligatorio y eran cuidadosamente separados de la sangrienta represión que se estaba llevando a cabo. En ese sitio despegaban aviones en vuelos ‘regulares’ y de los ‘otros’. Algunos aviones partían hacia la Antártida. Otros llevaban por el país a planteles de fútbol que competían en el mundial de 1978”.
“Así como había personas privadas ilegalmente de la libertad, otras disfrutaban de las piletas, de las canchas de tenis e incluso de un frontón en el que otras personas esperaban ser ‘trasladadas’ en un avión con el preciso significado que esa palabra tenía en el plan criminal probado: la muerte”, explicó el representante del ministerio público.
En esa base aérea“convivió”un aspecto“legal del Estado con una fase criminal. Allí donde algunos conscriptos cumplían con el servicio militar, también habitaba el temido grupo de tareas ‘G 100’ que regenteaba la geográficamente cercana ‘Mansión Seré’. Donde esos mismos jóvenes pasaban sus días, había personas que ingresaban a lo que se denominó la ‘casita de la muerte’, otros eran torturados”.
Precisamente los testimonios de más de seis centenares de ex “conscriptos” que realizaron el servicio militar en esa base durante la última dictadura fueron el andamiaje en el que se basó la investigación ya que ellos advertían sobre la existencia de “vuelos” aunque ninguno pudo dar precisiones sobre tripulantes de esos aviones o víctimas que hubieren sido arrojadas a las aguas.
Ello impidió a la fiscalía efectuar imputación concreta contra ningún jefe militar ante“la imposibilidad práctica de la investigación para llegar a hechos claros y distintos pasibles de ser contrastados con la ley pena”lo que“devela un difuso resultado cuya carga moral es demasiado compleja para adjudicarla en términos unilaterales a responsables a título individual”.
Los testimonios son“menciones que carecen de la entidad necesaria como para construir una imputación, siquiera con el escaso grado de sospecha”que exigen las normas legales“al menos por ahora y carecen de esa mínima certeza porque se trata de nombres derivados de la memoria de los testigos que, a su vez, remiten a versiones que se oían en la época de los hechos y que, para colmo de males, no tienen ningún tipo de referencia espacio temporal y tampoco de alguna víctima”, añadió Delgado.
“Concretamente se podrían resumir en la siguiente fórmula ‘se decía que fulano era parte de los vuelos de la muerte’ Esas afirmaciones y otras similares se repiten en muchos casos. Por ejemplo, sobre la existencia de presos ilegales y vuelos de exterminio”, afirmó el fiscal en su extenso dictamen.
“Dicho de otro modo, adjudicar responsabilidades de ese tipo constituiría una simplificación excesiva y carente del consenso necesario para que tenga sentido la inculpación para la comunidad en la que coexistimos”, afirmó Delgado, y no ocultó su decepción ante el “fracaso” de la investigación en cuanto a la falta de imputados.
Este tramo del expediente que Rafecas lleva adelante en el marco de la “megacausa” por los delitos de lesa humanidad cometidos en la órbita del Primer Cuerpo del Ejército, se basa en una denuncia deLorena Carla Pacino, quien refirió que su padreCarlos Pacinofue visto por última vez en el “Olimpo” antes de subir a un camión que lo condujo a la Primera Brigada Aérea de Palomar y cuyo cuerpo luego“fue hallado en la costa atlántica”.
Valió el fuego y el hielo, las noches sin descanso, los días en camino.
Valió acampar a la intemperie con la Gloria, desafiar con orgullo al prepotente, izar nuestro estandarte donde cuadra, ejercitar la hidalguía como un hábito, frente al asombro de los habituados al mal y al extravío.
Valió asistir al vuelo de los héroes; presenciar el temor del enemigo.
Valió entender que se es capaz de estar presente aunque se ciernan todos los peligros –sólo entre la nieve soberana, solo entre las rocas y entre el frío- aunque el mundo, a lo lejos, se duerma ajeno con sus propios ruidos. Podrán aventajarnos en las fuerzas, pero no en el Destino.
No te rindas.
Valió la Pascua esperando al invasor. Nunca en la Argentina de estos tiempos tuvo tanto sentido aquella nueva y eterna Resurrección de Jesucristo.
Valió consagrar a María –Madre y Reina- nuestras tierras robadas por una reina impía. Valió también,vivir el 25 de mayo en pie de guerra. Se entendió entonces, porqué la Patria es ante todo, su Historia Verdadera, porque es la obra de la Cruz y de la Espada.
No te rindas. No olvides. No hagas fugaz lo perenne ni venzas el espíritu invencible.
Valió comprobar que existen los milagros, que la hazaña desfila todavía; que el mando es de jefes que comandan; que no puede ordenar el cobarde, ni regir el incapaz de valentía. La milicia es un don que no admite tibios. Sólo el coraje distingue y jerarquiza.
No te rindas.
Valió la Fe creciendo con los riesgos, las misas del domingo entre peleas –el sacrificio sobre el Sacrificio-; el reparar los nombres de las Islas, la amistad de un alba centinela.
Valió la sed, el hambre, la fatiga. Y sobre todo... valió la sangre y la muerte batallando. El testimonio irreversible de todos los caídos. El ejemplo para siempre de los que regresaron nunca. Porque morir en la avanzada es ser lumbre y simiente, es convertirse en promesa del Triunfo.
Por ellos y por eso, no te rindas. No acates las noticias del desbande, no escuches el silencio de los cómplices, no conciertas marchar hacia el abismo; no creas a los prometedores de éxitos que ya son fracasos. Que no te engañen con la paz sin honra, con la tranquilidad afrentosa y el reposo sin honor y sin grandeza. No existe la Argentina si existe derrumbada. No queremos la tregua del sentenciado; queremos la vigilia tensa, armada.
No te rindas ahora, Combatiente. Caballero de la Orden Redentora de la Patria Cautiva. No entregues la Esperanza. Hay que volver. Para escarmentar a los perjuros, para restablecer en todos los espacios el tiempo de la hombría, para que despunte el Nuevo Amanecer. Para ser fieles, continuar y volver...
Los enemigos internos y externos nos han tomado de rehén a la Victoria.